Hasta el momento se han registrado 30 casos de hemorrágica epizoótica en 25 explotaciones ganaderas de Bizkaia, según datos proporcionados por la Diputación foral. De ellos, dos han fallecido. Estos casos se unen a los 32 registrados en Álava, 278 de Gipuzkoa y otros dos en Navarra. Dos de los bovinos afectados en Álava han fallecido igualmente.
El ente foral vizcaíno ha anunciado que establecerá una "ayuda extraordinaria" para financiar parcialmente los gastos en los que tendrán que incurrir las y los ganaderos cuyas vacas se hayan visto afectadas por la enfermedad.
Concretamente, y teniendo en cuenta que que la acción más efectiva para la contención de la enfermedad es la pronta detección de la misma, la ayuda irá dirigida a "compensar el pago de la primera visita veterinaria con 30 euros y a hacer frente al pago del tratamiento de los síntomas de esta enfermedad con otros 20 euros por animal afectado".
Según ha afirmado la institución foral en una nota, responsables del Departamento de Medio Natural y Agricultura "mantuvieron un encuentro con representantes del sector ganadero para anunciarles la adopción de esta medida, en la que se viene trabajando desde la aparición del primer caso en Bizkaia el pasado 21 de septiembre".
En esa reunión, EHNE-Bizkaia manifestó su acuerdo con las medidas adoptadas, si bien las considera insuficientes, ya que, en su opinión, la Diputación debería de cubrir las bajas producidas por la enfermedad, aspecto que el Departamento se comprometió a estudiar. En opinión del sindicato, "es importante que se puedan indemnizar las bajas (el gobierno de Cantabria lo va hacer) e incluso las perdidas (lucro cesante) en aquellas explotaciones más afectadas".
EHNE Bizkaia ha mantenido reuniones en el seno de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), donde ha comprobado que la virulencia de la enfermedad está siendo muy dispar: "Hay zonas y ganaderías donde los animales que muestran síntomas son un porcentaje bajo del rebaño y normalmente responden rápidamente al tratamiento, y zonas o ganaderías puntuales con una incidencia muy grande e incluso con animales que no responden al tratamiento y por consiguiente con un importante número de animales fallecidos".
Según ha explicado el sindicato, "parece ser que la enfermedad tiene mayor incidencia en los machos, y también hay mayor o menor incidencia según la raza", pero matiza que todos estos datos son provisionales, ya que se trata de una enfermedad nueva y aún hay mucho desconocimiento. Así, la situación “de momento” es muy diferente entre las diferentes comarcas: por ejemplo, la virulencia que la enfermedad está teniendo en comarcas como Urola (Gipuzkoa) es mucho mayor que la de Bizkaia.