Gotzone Sestorain: “Muchos de los que han salido con tractores estarán de acuerdo con algunas de nuestras propuestas, pero con la desintensificación no”

eutsi baserriari Traktoreak San Mamesen

[Argia]

Los tractores han tomado las calles, y las instituciones y los ciudadanos nos han interpelado. Para tratar este tema, Eli Pagola ha entrevistado a Gotzone Sestorain, del movimiento Etxalde, en el programa Egonarria. Ésta ha explicado lo que está en el fondo del problema de cultivo y que lo que ha salido a la calle es un "cóctel" con reivindicaciones muy diferentes. En sus palabras, la sociedad debe hacer un debate sobre el modelo de cultivo para salir de la crisis. También ha explicado las propuestas concretas que 140 agentes han presentado al Gobierno de Navarra, cuyo objetivo es desintensificar el cultivo y avanzar hacia la agroecología.

Gotzone Sestorain asegura que la protesta de los tractores es "un cóctel, una olla llena de reivindicaciones, y yo creo que la gente que está participando en estos movimientos es muy variada. En Navarra hay grandes tractoristas con grandes granjas, pero también se están acercando gente que se dedica a la ganadería extensiva, a modelos más sostenibles, a la ecológica... de todo. Hay un lío tremendo. Es evidente que hay una indignación general, una inquietud. Cada vez es más difícil desde la agricultura para poder llevar una vida digna. Pero esto no es cosa de ahora, esto es algo que viene de tiempo atrás".

¿Cuáles son los problemas que están en la base?

Sestorain ha recordado que los cultivos de aquí han estado liderados en las últimas décadas por la Política Agrícola Común Europea, que ha impulsado un modelo de cultivo productivista o industrial: "Nos han vendido muchos años que para vivir bien teníamos que seguir un modelo productivista. Es decir, que teníamos que producir mucho y barato. Eso es lo que nos han difundido una y otra vez. Algunos se han adentrado en ese camino, otros hemos intentado huir de ello o trabajar en caminos alternativos... Pero ¿cuál es la cuestión? Que actualmente la producción es cada vez más costosa, ya que en este modelo existe una gran dependencia de los combustibles fósiles y de los insumos externos, ya sean fertilizantes químicos, plaguicidas o piensos externos en la ganadería. Esto se ha ido encareciendo debido, por un lado, a la existencia de un mercado especulativo y, por otro, a las sequías, a otros problemas geoestratégicos (la guerra de Ucrania) que han agravado aún más la situación de mucha gente. A esto hay que añadir toda la carga burocrática que supone la Política Agrícola Europea Común".

"El sistema ha tocado techo", ha subrayado, citando el artículo de la LUZ de Jenofa Berhokoirigoin: "Se cree que se inventó la Política Agrícola Común Europea, el objetivo era que además de garantizar la seguridad alimentaria, los consumidores tuvieran alimentos baratos, algo que hoy estamos viendo que tampoco se cumple. Y que los campesinos tengamos unas condiciones de vida dignas, que tampoco se cumple".

También ha destacado los "efectos medioambientales que ha supuesto este modelo. Las tierras están esterilizadas, están contaminando las aguas, los sistemas que se han impulsado necesitan consumos de agua enormes y a eso se ha sumado la emergencia climática, la pérdida de biodiversidad y todos ellos".

El debate que eluden las instituciones, y el movimiento que capitaliza la agroindustria

Sestorain tiene clara la solución: "Hay que utilizar este momento para dar un análisis y un debate real". Ha precisado cuáles son las preguntas a responder a nivel social: "¿Qué modelo de alimentación queremos para nuestro país? Esa es la primera pregunta. Y la segunda, ligada a este modelo alimentario: ¿qué modelo agrario queremos? A eso tenemos que responder sinceramente". Pero Sestorain se lamenta de que "no estemos todavía en ese momento, porque veo a las instituciones de aquí poner parches. A ver qué dulzura dar a los campesinos pensando para que abandonen sus quejas. Sigamos en lo de siempre, sin mover nada ni gran cosa".

Mientras se evita este debate, Sestorain considera que la fuerza que "está capitalizando" la protesta de los tractores es "la agroindustria y el agronegocio". Según ha explicado, "después del debate que se ha dado en Europa, se veía que el modelo tocaba techo y estábamos en el punto de partida de un cambio de rumbo. Ahí se sitúan estrategias como Baserritik mahaira o estrategia de biodiversidad, en la que se proponían una serie de modificaciones para aportar algunas correcciones en materia medioambiental". Según Sestorain, estos cambios suponen una sobrecarga para el agricultor y de ello se está aprovechando la agroindustria para "meter sus reivindicaciones y su presión". Así se entiende que la primera medida aprobada por Europa ante la presión de los tractores haya sido modificar la norma que suponía limitar al cincuenta por ciento el uso de pesticidas.

En el manifiesto, firmado por 140 agentes en Navarra, se insta al Gobierno de Navarra a poner en marcha la estrategia Del Caserío a la Mesa de Europa. Pero Sestorain destaca que "hay que hacer pedagogía y eso no se puede dejar en manos del baserritarra". Y es que cuando durante tantos años el sector se ha acostumbrado a trabajar en una dirección, ha insistido en que el cambio de modelo requiere de un acompañamiento: "Son necesarios el acompañamiento, la formación, ser subvencionado... hasta ahora el Gobierno de Navarra no ha puesto medios para conseguir esos objetivos". En el manifiesto se proponen 60 medidas concretas para "poner inmediatamente coto a la agricultura y ganadería industrial y abrir un proceso de desintensificación".

El manifiesto se ha marcado como objetivo reducir las reses a la mitad de cara a 2050. Para Sestorain, la mayor dificultad que tienen es "cómo conseguimos que la sociedad, los agricultores y las instituciones se pongan a favor de un cambio de este tipo. Muchos de los que han salido a la carretera con tractores estarán de acuerdo con algunas propuestas, pero con la desintensificación no. Y las correlaciones de fuerzas no las tenemos a nuestro favor: una de las medidas que proponemos es reforzar las ferias. En los pueblos que tenemos ayuntamientos a favor es fácil hacerlo, pero en Estella, por ejemplo, tenemos grandes problemas con esto".

"Los agricultores tenemos que producir para cubrir las necesidades de aquí, no para ese mercado global"

Durante la sesión Egonarria, Sestorain ha denunciado el proceso de liberalización que se ha dado en el mercado: los tratados de libre comercio, por un lado, y el proceso de desregulación que se ha dado a nivel de mercado, por otro. "Lo que estamos demandando algunos agentes tanto en el País Vasco como en Europa es sacar la alimentación de todos esos tratados de libre comercio". Ha puesto el ejemplo de las consecuencias que conllevan los tratados de libre comercio, en su condición de pastor: "Si traen de Nueva Zelanda la oveja o los productos lácteos, los tienen que traer a precios mucho más bajos que el de aquí. Esto supone aquí una bajada total de los precios del mercado, un hundimiento, con el consiguiente impago al ganadero de un precio en función de los costes. Eso es lo que se dice dumping, y nosotros también afectamos a otros países porque desde aquí también se exporta mucho. Esto es consecuencia del libre comercio, por eso decimos que la alimentación debe salir de los mercados y la alimentación debe empezar a desarrollarse el camino de la soberanía. Los agricultores tenemos que producir para cubrir sus necesidades, no para ese mercado global".