Esta semana, y con motivo del Día Internacional de la Seguridad y Salud en el Trabajo, la organización Etxalde y los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, HIRU y CGT (este último en Nafarroa) han denunciado que "las personas trabajadoras nos jugamos nuestra salud en empleos que no garantizan ingresos suficientes para una vida digna".
En el mundo mueren miles de trabajadores y trabajadoras tanto por accidentes como por enfermedades laborales. Euskal Herria no es una excepción, donde todos los años se repiten datos escalofriantes. Como ejemplo, Nafarroa es el segundo territorio líder a nivel estatal en tasas de accidentes, sólo por detrás de las Islas Baleares.
Han denunciado que en Euskal Herria "se repiten constantemente los mismos patrones en los accidentes en los últimos años". Los datos oficiales reconocen miles de accidentes laborales leves y graves, con una tendencia al alza. Tampoco hay interrupción en el número de muertes, con alrededor de 70 muertes en accidente laboral todos los años.
Estos datos inocultables de accidentes "ponen de manifiesto el fraude del propio sistema, ya que el reconocimiento de las dolencias laborales que en primera instancia está en manos de las mutuas es totalmente testimonial". A modo de ejemplo, cada año de media no se reconoce ni una docena de “cánceres laborales».
Fracaso de la prevención
La administración reconoce miles de accidentes laborales (en concreto más de 100.000 en 2023), "lo que demuestra el fracaso del sistema de prevención". Son reconocidos porque no se pueden ocultar. En cambio, las enfermedades profesionales no se reconocen y son derivadas sistemáticamente, por amplia mayoría, a Osasunbidea y Osakidetza. El sistema provoca muchas enfermedades profesionales, al igual que accidentes, pero las empresas, a través de las mutuas, tienen la posibilidad de que no sean reconocidas.
Un año más, se están imponiendo datos escalofriantes. Teniendo en cuenta el conjunto de Euskal Herria, en 2024 ya llevamos 21 trabajadores y trabajadoras fallecidas sólo en accidentes laborales.
"El sistema de prevención ha fracasado porque la patronal lleva 30 años sin cumplir la normativa. La normativa de prevención es la que menos se cumple. La clave para que esto ocurra es que la administración y los distintos gobiernos muestran complicidad con la patronal y, de ese modo, no ponen medios para garantizar su ejecución. Sólo así podemos entender que en la CAV haya tan solo 50 inspectores y en Nafarroa 12".
Por el contrario, los gobiernos de Nafarroa y de la CAV encargan la implantación de la salud laboral a estructuras como el INSL y Osalan, que recordamos que son entidades consultoras, "garantizando así la impunidad de la patronal", ya que su función es exclusivamente la de asesorar, evitando la imposición de multas.
Desde que "el señor Urkullu" asumió el cargo en diciembre de 2012, han muerto 444 trabajadores y trabajadoras en accidente laboral. De cara a la nueva legislatura, los sindicatos han reivindicado "cambios en este asunto":
Desde el frente que forman Etxalde y los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, HIRU y CGT Nafarroa seguirán luchando para que se garantice la salud laboral, "para que de una vez por todas la patronal cumpla con lo que le corresponde, porque tenemos derecho a volver a casa vivas y sanas".