Los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde han colocado pancartas de grandes dimensiones en Bilbo (Puente Pedro Arrupe), Donostia (Muelle) y Gasteiz (Virgen Blanca) con el siguiente lema: «50 trabajadoras y trabajadores han muerto en Euskal Herria en 2024. La patronal y las instituciones nos enferman y nos matan». Además, la intersindical formada por las organizaciones citadas se concentrará mañana, jueves, 31 de octubre a las 12:00 horas en Bilbo ante la sede de la patronal Confebask (Gran Vía, 50).
La mañana de ayer, Osalan informó de que el trabajador de 59 años R.I.U, herido de gravedad en la empresa Maderas Etxeari de Zornotza tras caerse desde una altura el pasado 15 de octubre, falleció en la tarde del pasado viernes, 25 de octubre, a causa de las heridas producidas. El trabajador llevaba 14 años trabajando en la empresa de Dana-Air Aire Comprimido.
Asimismo, fuentes de Osalan también informaron de que el pasado 17 de octubre, el trabajador L.M.B.A., de 52 años, sufrió un accidente grave en Zierbena como consecuencia de una proyección provocada por el motor de una máquina, que lo hirió de forma grave en la cara. Ayer, este trabajador que llevaba más de 5 años trabajando en la empresa Viuda de Sainz, falleció a consecuencia de las heridas sufridas
La lista negra anual que provoca la patronal acumula ya en este 2024 50 muertes. Entre ellas las caídas en las alturas cobran, un año más, un gran protagonismo. Las medidas de seguridad a aplicar para evitar riesgos en alturas son de sobra conocidas. Detrás de cada uno de estos accidentes se esconde siempre "la dejadez criminal de las empresas, que, por imperativo legal, deberían articular una serie de medios para garantizar en todo momento la aplicación de las diferentes medidas de seguridad. Algo que, sistemáticamente, no hacen".
También abundan los accidentes graves y mortales provocados por máquinas, aunque la normativa para protegerse de ellas es muy estricta. En la práctica, las empresas "incumplen de forma habitual la normativa de seguridad de las máquinas, sin que les suponga ningún obstáculo. La impunidad es intolerable".
Esta "dejadez criminal" ha provocado que en los últimos 10 años, en Euskal Herria, al menos 82 trabajadoras y trabajadores hayan muerto por caídas de altura, la mayoría en el sector de la construcción. Con esta nueva muerte, son 10 las muertes en el trabajo ocurridas en Euskal Herria desde inicio de año por esta causa.
"Esta situación no sería posible si no hubiera complicidad institucional. Porque, como venimos denunciando, no poner medios para no obligar a la patronal a que cunpla con la normativa no es un problema administrativo, sino una decisión política".