El 15 de febrero se celebra en Madrid el juicio contra el periodista vasco José Manzaneda, de cubainformacion.tv, acusado de supuestos delitos de injurias graves, calumnias graves y de incitación al odio. La acusación particular, ejercida por Javier Larrondo, presidente de “Prisioners Defender”, pide seis años de prisión y multa de 15.600 euros. El Ministerio Fiscal y la defensa solicitan la absolución al considerar que los hechos no constituyen delito alguno.
El 5 de octubre de 2020, José Manzaneda, publicó un reportaje en cubainformacion.tv (perteneciente en ese momento a la Asociación Euskadi-Cuba), titulado “Crear una crisis sanitaria en Cuba, objetivo de la guerra contra su cooperación médica”. En dicho artículo, entre otras consideraciones, se afirmaba: «Javier Larrondo, miembro de una de las familias de la burguesía cubana amparada por la dictadura de Fulgencio Batista, es, como Marco Rubio y Donald Trump, un criminal de guerra. Y como tal debería ser tratado». La expresión "criminal de guerra" fue suprimida de la web el día 13 de octubre de 2020.
Javier Larrondo es una persona que ejerce una actividad política pública en su calidad de presidente de la ONG “Prisioners Defender, una organización de ultraderecha, según cubainformación, que defiende a presos cubanos que considera como "políticos" y ataca a la cooperación médica de Cuba.
Según aclara en una nota de prensa el abogado defensor de Manzaneda, Endika Zulueta, "es obvio que, en este contexto, la expresión 'criminal de guerra', es una figura retórica, utilizada como crítica política, en relación con la 'guerra contra la cooperación médica' que desarrolla el Gobierno cubano, y en modo alguno guarda relación con los crímenes de guerra realizados en el contexto de un conflicto armado".
«No solo nos parece obvio -explica Zulueta-, al igual que al Ministerio Fiscal, que los hechos no constituyen delito alguno, sino que es una paradoja que el presidente de una asociación que dice defender derechos humanos pretenda, no solo criminalizar la libertad de expresión, la libertad de información, la libertad ideológica y el pluralismo político, sino que solicita que ingresen en prisión durante más de seis años quienes legítimamente discrepan de una determinada práctica política en un artículo periodístico».
El juicio se celebrará a las 11:30 de este jueves, 15 de febrero. Previamente, a las 10.30h, se celebrará una concentración de apoyo al periodista vasco, que también coordina la asociación Euskadi-Cuba.
La Coordinadora de organizaciones no gubernamentales de desarrollo de Euskadi ha suscrito este comunicado de apoyo a Euskadi Cuba:
A mediados del mes de febrero, se celebrará en Madrid el juicio contra la representación legal de la asociación Euskadi-Cuba, propietaria hasta 2020 de la web www.cubainformacion.tv, y contra el periodista coordinador de la misma, a raíz de una querella criminal que solicita una condena de seis años de cárcel y una indemnización de 50 mil euros, por un trabajo periodístico, titulado “Crear una crisis sanitaria en Cuba: objetivo de la guerra contra su cooperación médica”.
Este trabajo describe y denuncia la labor de la organización querellante en la destrucción de los convenios médicos de Cuba con algunos países que, además de llevar servicios de salud a millones de personas en comunidades empobrecidas, aportan algunos ingresos para sostener, en un escenario de agudas sanciones de EEUU, parte del sistema sanitario público interno de la Isla. El actual desabastecimiento de medicamentos y material sanitario en Cuba sería causa directa de ello, según el reportaje.
La organización querellante, además, ha difundido grotescas falsedades en importantes medios de comunicación, como que Euskadi-Cuba recibe fondos públicos (Gobierno vasco) para “desestabilizar Europa y España” o para “minar Europa y sus instituciones”, y que se nutre de “fondos de cooperación” para “labores de inteligencia”, todo en referencia a las subvenciones recibidas y debidamente justificadas para proyectos de cooperación en la Isla.
Estamos ante una operación de intoxicación y ante un intento de destrucción de la labor solidaria de cooperación al desarrollo de una ONGD, cuyos proyectos benefician a miles de familias en la Isla; y ante un ejercicio de amedrentamiento del periodismo crítico, necesario para la comprensión de la realidad de los países del Sur Global y las causas del empobrecimiento y la desigualdad, y por lo tanto imprescindible para su transformación.
Por ello: