Los sindicatos y Etxalde se suman a las movilizaciones de los pensionistas el 5 de abril
ELA, LAB, ESK, STEILAS, Etxalde e Hiru se adhieren a la lucha en favor de unas pensiones y un salario mínimo justo y suficiente y se movilizarán en las 4 capitales de Hego Euskal Herria.
El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha convocado movilizaciones para el 5 de abril en las 4 capitales de Hego Euskal Herria, bajo el lema `Soldata eta pentsio duinak. Orain, hemen eta denontzat. Por unas pensiones y un salario mínimo justo y suficiente´. El Movimiento de Pensionistas impulsó hace unos meses una Iniciativa Legislativa Popular para lograr unas pensiones justas y suficientes para todas las personas. La reivindicación concreta es el complemento de las pensiones hasta su equiparación con el SMI. Si hubiese un SMI propio en Hego Euskal Herria, esa sería la referencia.
Se trata de una reivindicación que comparten ELA, LAB, ESK, STEILAS, Etxalde e Hiru. Es más, la lucha por unos salarios y pensiones dignas es una lucha conjunta y complementaria en contra de la pobreza y la exclusión social, las cuales van en aumento en los últimos años. Se trata de unas reivindicaciones que ya unieron a las personas pensionistas y la mayoría sindical en la Huelga General del 2020.
Hace unos meses, ELA, LAB, ESK, STEILAS, Etxalde e Hiru iniciaron un camino conjunto para conseguir un salario mínimo propio para Euskal Herria, a través de dos posibles vías: un acuerdo interprofesional y una ILP para conseguir la competencia y decidir aquí un salario mínimo propio.
Por ahora -denuncian-, las patronales han hecho caso omiso de la reivindicación para un SMI propio, “a pesar de que existe un sentir generalizado de que el salario mínimo impuesto por el Estado es completamente insuficiente para vivir en Euskal Herria”. Esto afecta mayoritariamente a sectores feminizados, racializados, personas con diversidad funcional o personas jóvenes que no pueden independizarse debido a la precariedad del mercado de trabajo, la problemática de la vivienda etc.
En cuanto a la Iniciativa Legislativa Popular, para lograr un salario mínimo propio, si bien el Parlamento Vasco ha aceptado a trámite la ILP, denuncian que el Parlamento de Navarra la ha rechazado, “dando así la espalda a miles de personas trabajadoras vulnerables”.
Por tanto, la mayoría sindical vasca considera imprescindible movilizarse y construir alianzas con el Movimiento de Pensionistas para lograr pensiones y salarios dignos y suficientes para todas las personas en Hego Euskal Herria. Por eso, se movilizarán conjuntamente el 5 de abril en las 4 capitales de Hego Euskal Herria.
Mujeres pensionistas de Euskal Herria reclaman la reducción de la brecha de género en las pensiones
Las Mujeres del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria presentaron ayer en la sala Bilborock de Bilbao un manifiesto que exige medidas urgentes para garantizar pensiones dignas y reducir la brecha de género en este ámbito. Etxalde, junto a otros grupos, se ha adherido a este manifiesto.
El evento, organizado por las Mujeres del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, ha reunido a feministas, grupos de mujeres y pensionistas que, semana tras semana, se manifiestan en plazas de toda la región. Por parte del movimiento Etxalde estuvieron Amets Ladislao y Maite Aristegi.
El objetivo principal ha sido compartir experiencias y reflexionar sobre la situación de las mujeres pensionistas, especialmente aquellas con pensiones no contributivas.
Durante el acto, se ha destacado que la vulnerabilidad económica de estas mujeres no es casual, sino el resultado de un sistema patriarcal que históricamente ha relegado a las mujeres a las tareas de cuidado, no reconocidas ni remuneradas. Esta dedicación ha impedido que muchas accedan al mercado laboral o lo hagan en condiciones precarias, lo que se traduce en pensiones más bajas.
Datos que reflejan la desigualdad
El manifiesto presentado durante el acto incluye datos alarmantes:
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- En 2023, de las 6.000 personas que percibían una pensión no contributiva en la CAV (484,6 € mensuales en 14 pagas), el 67% eran mujeres.
- Para noviembre de 2024, esta cifra ha aumentado a 7.859 personas, de las cuales aproximadamente 5.300 son mujeres.
- Muchas de estas mujeres, especialmente las mayores de 80 años, enfrentan dificultades para llegar a fin de mes debido a la insuficiencia de sus pensiones.
Además, la segregación laboral por sexo y la brecha salarial han agravado la situación, perpetuando la desigualdad en las pensiones. Las mujeres que sí han accedido al mercado laboral lo han hecho, en muchos casos, a costa de una doble jornada (trabajo remunerado y tareas de cuidado), lo que ha limitado sus cotizaciones y, por ende, el monto de sus pensiones.
Iniciativa Legislativa Popular: una propuesta para la justicia económica
Ante esta realidad, el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha presentado una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que busca complementar las pensiones mínimas hasta equipararlas al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), actualmente fijado en 1.184 € mensuales. Esta medida, admitida a trámite en el Parlamento Vaso, beneficiaría a unas 66.000 mujeres pensionistas, reduciendo significativamente la brecha de género en las pensiones.
La ILP propone:
- Un complemento individualizado, independientemente de las relaciones de convivencia.
- Que la administración pública vasca actúe de oficio para garantizar que todas las personas con derecho al complemento lo perciban.
- Que el complemento se retribuya en 14 pagas, conforme a la Carta Social Europea.
Llamamiento a la acción
Las mujeres pensionistas han hecho un llamado a la sociedad para que apoye esta iniciativa con su firma. «No podemos permitir que las mujeres que dedicaron su vida al cuidado de otros vivan sus últimos años en la pobreza», afirmó una de las portavoces durante el acto.
Además, han subrayado que garantizar una pensión mínima digna no solo es una cuestión de justicia económica, sino también un paso crucial hacia la igualdad de género. «Esta ILP es una oportunidad para corregir una injusticia histórica y asegurar que las mujeres mayores vivan con dignidad», añadió otra participante.
Conclusión: una lucha por la justicia social
El acto en Bilborock ha servido como un espacio de encuentro y reflexión, pero también como un recordatorio de que la lucha por la dignidad de las mujeres pensionistas es una lucha por la justicia social y la igualdad. Con la ILP en marcha, las mujeres de Euskal Herria esperan que este sea el primer paso hacia un futuro más justo para todas las personas mayores.
Los sindicatos vascos y Etxalde acuerdan una iniciativa conjunta sobre el salario mínimo propio
Los sindicatos vascos ELA, LAB, STEILAS, ESK, HIRU y el movimiento Etxalde han anunciado una nueva iniciativa conjunta para superar el veto de Confebask a la mesa de negociación para acordar el salario mínimo.
Nota conjunta de las seis organizaciones.
El pasado 6 de febrero, Confebask rechazó la constitución de una mesa para acordar un salario mínimo propio, declinando la petición de todos los sindicatos. La posición de la patronal es absolutamente inaceptable, tanto en las formas como en el fondo.
En cuanto a las formas, Confebask renunció a la función que le corresponde en la negociación colectiva. En lugar de dar paso al debate y a la negociación, adoptó una posición absolutamente autoritaria. Una vez más se pone de manifiesto, de la manera más evidente, la falta de voluntad de diálogo y acuerdo por parte de la patronal. Su actitud autoritaria es la que agudiza el conflicto en el mundo laboral, como afirmó el propio vicelehendakari y consejero de empleo Torres.
En cuanto al fondo, Confebask ha abrazado las tesis neoliberales. Aboga por salarios bajos y la desregularización de las relaciones laborales, aunque ello suponga un doble perjuicio: en primer lugar, un daño para las y los trabajadores que con esos bajos salarios tienen dificultades para ganarse la vida y, especialmente, para quienes sufren brechas de género, origen o edad. En segundo lugar, un perjuicio para el desarrollo socioeconómico de Euskal Herria, puesto que está demostrado que la precarización de las condiciones laborales precariza y desvaloriza la propia actividad económica, al tiempo que perjudica la cohesión social. Este tipo de políticas son perjudiciales para Euskal Herria; debemos avanzar como pueblo justo en la dirección contraria: el reparto del empleo, los cuidados y la riqueza, para construir un modelo de sociedad más justo y viable.
Nueva iniciativa
Así las cosas, no damos por buena la negativa de Confebask a constituir la mesa. Y con el objetivo de superar esa negativa, queremos anunciar una nueva iniciativa política. Hasta ahora cada sindicato ha tenido su propia referencia en cuanto al salario mínimo y ahora hemos acordado una propuesta conjunta que pondremos en la mesa de negociación. Se trata de una propuesta perfectamente viable y realizable, que atiende al actual contexto socioeconómico y a la realidad de la negociación colectiva. Sin renunciar a nuestros propios objetivos, hemos elaborado una propuesta que pueda ser aceptable para todos los agentes, para que, tras establecer un salario mínimo propio, podamos analizar las consecuencias y profundizar en el debate de cara al futuro.
Asimismo, hemos decidido convocar una nueva reunión para constituir la mesa negociadora: el 20 de marzo en la sede del Consejo de Relaciones Laborales en Bilbao. A lo largo de este mes nos pondremos en contacto con el Gobierno Vasco (tanto con el Lehendakari Pradales como con el Vicelehendakari y Consejero de Empleo Torres) y con la Patronal para informarles directamente de esta propuesta conjunta y solicitar la constitución de la mesa.
Pedimos al Gobierno Vasco que no dé por buena la postura de Confebask. El Gobierno Vasco no puede limitarse a decir que la actitud de Confebask agravará el conflicto; debe utilizar todos los medios a su alcance para que Confebask levante el veto a la mesa de negociación. El Gobierno Vasco realiza actos con Confebask habitualmente, le ofrece apoyo político, mediático, logístico y económico. Pues bien, le pedimos que condicione ese apoyo y exija a Confebask que constituya la mesa e inicie la negociación de un salario mínimo propio, es decir, que asuma su función y responsabilidad.
Asimismo, hacemos una interpelación directa no sólo a Confebask, sino también a las patronales territoriales que integran Confebask, CEBEK, Adegi y SEA. Una vez conocida nuestra propuesta conjunta de negociación, queremos que CEBEK, Adegi y SEA clarifiquen su posición e interpelen a Confebask para negociar.
Movilizaciones
Para finalizar, queremos reafirmar nuestra determinación de conseguir un salario mínimo propio y digno. Junto a esta iniciativa que hemos anunciado, apostamos por la activación social. Primero, vamos a organizar movilizaciones a favor del salario mínimo propio, que anunciaremos en el momento que corresponda. En segundo lugar, vamos a promover el debate social que Confebask no quiere abordar, organizando el 16 de mayo unas jornadas científicas en torno al salario mínimo. En tercer lugar, recogeremos miles de firmas a favor del salario mínimo propio en los próximos meses, para llevar a Confebask a la mesa de negociación y, si el veto que quiere imponer la patronal no se superara desde la mesa de negociación, superarlo vía modificación legal.
Por tanto, en los próximos meses todos los trabajadores y trabajadoras tendrán la oportunidad de dar un impulso a esta reivindicación estratégica. Con el empuje de la clase trabajadora superaremos los obstáculos que pudieran aparecer en el camino.
Sindicatos y Etxalde hacen público el Informe de Siniestralidad Laboral de 2024
Los sindicatos LAB, STEILAS, ESK, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde han hecho público el Informe sobre Siniestralidad Laboral en Euskal Herria correspondiente al año 2024. El informe muestra que los datos de siniestralidad del año 2024 superan los del año 2023. Esto se debe, entre otros factores, a que no se han adoptado medidas efectivas para evitar los accidentes laborales, por lo que se mantiene la tendencia de años anteriores.
Durante los últimos años la clase trabajadora de Euskal Herria está sufriendo las consecuencias del declive y la privatización de los servicios públicos. Los servicios públicos no se han desarrollado adecuadamente, y ahora, en lugar de reforzarlos, los partidos políticos que gobiernan las instituciones de Hego Euskal Herria han optado por debilitarlos poco a poco.
No es una transformación que se haya producido de un día para otro, sino que se está haciendo lenta y progresivamente. Se están dando pasos hacia la privatización, y la calidad de los servicios está empeorando, esto conlleva el deterioro en las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras.
CONCLUSIONES
1. Los datos de siniestralidad laboral de este año confirman la reflexión de años anteriores. Los datos de siniestralidad del año 2024 superan los del año 2023, tanto en los datos gestionados por los sindicatos como en los datos oficiales. No se han adoptado medidas efectivas para evitar los accidentes laborales, por lo que se mantiene la tendencia de años anteriores. En determinados sectores es más fácil sufrir accidentes graves o mortales, como la silvicultura intensiva, la construcción, el transporte, la industria, etc.
2. En cuanto a las dolencias o enfermedades prefesionales, tanto en la CAV como en Nafarroa han sido tantas enfermedades declaradas como en 2023, pero el sub-registro que realizan las mutuas sigue siendo un vergonzoso ejercicio de fraude. Según la Organización Mundial de la Salud, entre el 30% y el 40% de todos los cánceres son causados por el trabajo, pero en Euskal Herria son muy pocos los reconocidos. El reconocimiento de los trabajadores y trabajadoras afectadas por el amianto es una dificil tarea que muchas veces llega tras la muerte. Gracias a las organizaciones que trabajan en torno a los y las damnificadas del amianto ASVIAMIE y ADAVAN, en Hego Euskal Herria hemos conocido 30 fallecimientos en 2024 por enfermedades profesionales generadas por este agente, pero dichos datos no constan en los datos oficiales. Lo mismo pasa con los problemas de origen psicosocial, que afectan de forma notoria a sectores feminizados. Estas enfermedades no están reconocidas como contingencias laborales. La mayoría de las enfermedades musculoesqueléticas derivadas del trabajo, con mayor incidencia en sectores feminizados, se tipifican como contingencias comunes para evitar la responsabilidad de las empresas. Las enfermedades profesionales siguen estando condenadas a la mayor invisibilidad, cuestión que afecta en mayor medida a las mujeres. Hay trabajos que matan y otros que no dejan vivir.
3. Los datos oficiales ocultan la realidad:
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- La comunicación de accidentes la realiza la propia empresa. Miles de accidentes leves se quedan sin comunicar y los trabajadores y trabajadoras son atendidas en el botiquín o en ambulatorios fuera de las horas de trabajo.
- La calificación de los accidentes no se realiza en base a criterios objetivos porque aun a día de hoy, no están regulados legalmente. Por lo tanto, la designación de la gravedad de cada accidente la decide el médico de la Mutua, teóricamente con criterio técnico, pero, a nuestro juicio, con criterios empresariales. Por lo tanto, no podemos llegar a conclusiones fiables en relación a los datos oficiales. Se observa que los accidentes laborales han sufrido un aumento en general, pero tenemos dificultades para analizar la evolución de los accidentes leves y graves.
- En el último año está aflorando con fuerza un nuevo ejercicio fraudulento de las Mutuas: no admitir los accidentes traumáticos declarados y comunicados por las propias empresas. Hay ejemplos graves, como en los centros especiales de empleo, donde los accidentes traumáticos más evidentes no se reconocen como accidentes laborales. Para ello, las Mutuas hacen uso de la diversidad funcional de la persona trabajadora y alejan la lesión de la responsabilidad de la empresa. Este fraude, que es derivado como baja común, afecta al salario del trabajador o trabajadora y muchas veces se ven obligados y obligadas a solicitar altas voluntarias debido a la asfixia económica.
- Siguiendo con el fraude ejercido por las mutuas, mencionaremos un caso de denegación de muerte laboral. Un trabajador de 42 años que realizaba labores de construcción en Lumbier el pasado 16 de septiembre falleció como consecuencia de las graves heridas sufridas tras la caída desde un andamio. Aunque inicialmente se gestionó oficialmente como accidente de trabajo, la Mutua obtuvo los datos de la autopsia realizada por el Servicio de Salud - Osasunbidea y se valió de ellos para negar el origen laboral del accidente calificándolo como accidente común. La praxis de la mutua pone patas arriba los principios de la prevención obviando la multicausalidad de los accidentes, ocultando con ello los riesgos derivados del trabajo e impidiendo la integración de medidas.
- Estos y otros ejemplos demuestran que el absentismo denunciado por la patronal es una cortina de humo y que el principal problema son los riesgos laborales, los ries- gos que genera la patronal incumpliendo la legislación, con resultados dramáticos: 64 muertes y 102.000 accidentes traumáticos.
- Los sindicatos contabilizamos 64 personas fallecidas por accidente de trabajo; mien- tras que la administración ha reconocido 47 muertes. Los gobiernos utilizan una se- rie de argucias para ocultar las muertes, ignorar a las y los trabajadores fallecidos en accidente de trafico, obviar las muertes no traumáticas, y no aceptar los accidentes traumáticos, como estamos viendo cada vez con más claridad.
- Resumiendo: las mutuas tan sólo reconocen aquellos accidentes que no puedan negar usando cualquier resquicio para derivarlas a contingencia común, pudiendo utilizar cualquier excusa para negar el origen laboral de los accidentes. El resultado de este fraude es considerado como “dato oficial” por los gobiernos y la patronal se vale de la estratagema para ocultar el verdadero problema del absentismo, la pérdida de salud en el trabajo.
4. La influencia de los riesgos laborales en las muertes no traumáticas es innegable. El notable descenso de la incidencia cardiovascular en la población en los últimos años no ha tenido el mismo reflejo en el mundo laboral. Desde 2006 hasta la actualidad, en el Estado español el número de muertos por un infarto ha descendido un 40%, y en Hego Euskal Herria se podría pensar que la tendencia ha sido similar. Esto, en general, podemos decir que es consecuencia de tendencias más saludables en la vida. En cambio, la incidencia de infartos en la población trabajadora activa de Hego Euskal Herria mantiene las cifras de 2006. Podemos entender, por tanto, que los factores laborales como el estrés, los ritmos cada vez más altos, la presión, la precariedad, etc., influyen de forma significativa en este tipo de muertes.
5. La doble jornada de las mujeres tiene un impacto directo en la salud laboral. Las mujeres siguen siendo las encargadas del hogar y de los cuidados en mayor medida, con dobles jornadas, realizando tareas domésticas y de cuidado, además del empleo. La presión y el estrés suponen una pérdida de salud, y los problemas musculoesqueléticos también suben considerablemente en estos casos.
6. El 73% de los trabajadores y trabajadoras afiliadas a la seguridad social trabajan en el sector servicios y su número está en constante ascenso. A la vez que los servicios cada vez tienen más peso, la sociedad está cada vez más alejada del sector primario y realiza menos procesos productivos, por lo que los accidentes deberían tener una tendencia a la baja, pero no está siendo así.
LA SITUACIÓN INVISIBLE DE LAS MUJERES
Al presentar los datos derivados de los accidentes laborales podemos volver a caer en el riesgo de invisibilizar la pérdida de salud y las muertes de las mujeres y de las trabajadoras de los sectores feminizados. También cuando hablamos de salud laboral, debemos hacer un intento diferenciado de visibilizar la realidad de las mujeres. De hecho:
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- La mayoría de las enfermedades profesionales de los sectores feminizados no están reconocidas ni se tienen en cuenta: ya sean las relacionadas con tareas repetitivas, de carga y las que inciden directamente en el sistema musculo-esquelético, o todos los riesgos psicosociales asociados a trabajos de cuidados no declarados, con componentes emocionales muy altos. El nivel de enfermedad relacionada con el estrés es casi el doble en las mujeres (en comparación con los hombres). Esto, a su vez, se asocia con enfermedades del corazón, musculoesqueléticas, depresión y agotamiento (NIOSH 2018), pero la mayoría de las veces se tratan como enfermedades comunes, ya que cuando acudimos a las mutuas de patronales niegan sistemáticamente el origen laboral de estas enfermedades.
- En 10 años, las enfermedades profesionales en las mujeres han aumentado un 44%, y esto sólo son las reconocidas, porque sabemos que son muchas más las no declaradas. Debido a las situaciones de precariedad que se dan y la negativa de las mutuas de las patronales a reconocer el origen laboral de las patologías, la realidad es mucho más grave.
A la hora de analizar el informe que nos ocupa, por tanto, será un elemento a tener en cuenta: la invisibilidad de la salud laboral de las mujeres.
ACCIDENTES DE TRABAJO MORTALES
Los y las trabajadoras contabilizadas en accidentes laborales en 2024 por los sindicatos LAB, STEILAS, ESK, EHNE-etxalde e HIRU ascienden a 64, de los que 38 se han producido en la CAV, 17 en Navarra y otros 9 son trabajadores vascos fallecidos en el extranjero o en el mar. Esta cifra recoge los accidentes mortales de los que hemos tenido conocimiento, pero podrían ser más.
De nuevo los datos confirman que la muerte por accidente es más probable en determinados sectores: forestal, industrial, transporte, construcción, agricultura, pesca, etc. A pesar de la normativa específica de algunos de estos sectores, la tasa de mortalidad es significativamente más alta. A pesar de que en los últimos años se ha ido adaptando la normativa de salud laboral para las actividades peligrosas, las tasas de accidentes siguen siendo muy altas. Detrás de los accidentes analizados siempre está presente el incumplimiento de la normativa por parte de la empresa.
También debemos tener en cuenta el alto número de muertes en el ámbito de la subcontratación. Una y otra vez hemos denunciado que debido a la subcontratación aumenta la precariedad y el empeoramiento de las condiciones laborales, y la garantía de la salud laboral no es una excepción. La subcontratación tiene como objetivo reducir los gastos de la patronal a costa de las condiciones laborales de los y las trabajadoras. Garantizar la salud laboral de los y las trabajadoras de las subcontratas es, por tanto, una de las últimas preocupaciones de la patronal.
Por otro lado, más allá de los accidentes traumáticos, las muertes “no traumáticas” tienen una presencia muy importante, son producidas por problemas cardiovasculares y representan el 30% de los accidentes laborales mortales.
Históricamente, tanto la patronal como la administración las han calificado como “muertes naturales”, pero a medida que pasa el tiempo y el conocimiento de los datos es más amplio, la relación con los factores laborales es cada vez más evidente. Son accidentes multicausales, en los que además de los factores propios de cada persona, también influyen los hábitos de vida. Entre los factores más importantes derivados del trabajo, el estrés y los riesgos psicosociales son el otro componente importante de esta realidad. En los últimos años no hemos mejorado, sino que hemos empeorado considerablemente. En la actualidad, tanto Osalan como NOPLOI reconocen los riesgos psicosociales como el primer factor de riesgo que sufre la clase trabajadora vasca.
En los últimos 15 años, las muertes por problemas cardiovasculares en todo el Estado español han descendido considerablemente, según el Ministerio de Sanidad. De 22.028 muertes en 2006 a 13.463 en 2021. En cambio, las muertes no traumáticas que se dan en el mundo laboral no han mostrado una tendencia a la baja, incluso han subido en ocasiones. Además, debemos tener en cuenta que sólo están contabilizados los fallecidos en horas de trabajo. El incremento del número de trabajadores y trabajadoras cotizantes no justificaría en absoluto ese número de muertes no traumáticas, sino que se compensaría en gran medida con esa tendencia a la baja que se está dando en el conjunto de la sociedad. Así, debemos señalar que la influencia de los factores de riesgo en el trabajo es evidente, cada año el estrés y los riesgos psicosociales están mas presentes, lo que repercute en el alto número de muertes no traumáticas.
En torno a este factor de riesgo, que supone el 30% de las muertes de los trabajadores, Osalan y NO- PLOI tienen un enorme trabajo pendiente. Deben intervenir en el control de los factores que influyen en el trabajo. No podemos permitir que, como se está haciendo hasta ahora, sean gestionadas como “muerte natural”, aunque lamentablemente las instituciones mencionadas siguen en esos esquemas.
Por número de trabajadores y trabajadoras, la silvicultura intensiva vuelve a dejar este año los datos más duros, 3 muertes y varios accidentes graves. Sigue demostrando año tras año que es el sector más peligroso. Hay unos 1.000 trabajadores y trabajadoras en esta tarea y la tasa de mortalidad sigue siendo muy alta. Las condiciones laborales son muy duras y el incumplimiento de la normativa de salud laboral por parte de la patronal está muy normalizado. El fracaso de los planes de recomendaciones que desarrollan anualmente OSALAN y NOPLOI alimentan la lista de defunciones. Este año, desde la intersindical hemos propuesto una batería de medidas a las Diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa, así como a las Juntas Generales de Gipuzkoa, tras varias iniciativas; hasta hoy no hemos recibido respuesta.
La situación del transporte también requiere una mención especial, ya que cada vez es más complicada. Las condiciones de los y las trabajadoras del sector se van endureciendo año tras año. Los mercados internacionales, sin ninguna medida de protección de los estados, empeoran las condiciones laborales, en ese sector y en esa profesión globalizada. En Nafarroa y Gipuzkoa el convenio sectorial está sin renovar desde 2008, con la precarización que ello supone. La renovación de los convenios es una de las medidas más importantes para mejorar la salud laboral.
El año pasado fallecieron diez personas trabajadoras en accidente laboral, este año 14. De ellos, 4 han sido calificados como accidentes “no traumáticos”, a menudo parados en el camión, cuando se encontraban en la cabina. Las largas jornadas laborales, los altos niveles de estrés, el trabajo sedentario, el control riguroso de la digitalización y la presión en el sector hacen del transporte un escenario idóneo para sufrir accidentes traumáticos o no traumáticos.
Destaca, por un lado, la edad de las personas. Casi todas tenían más de 50 años. El sector envejece, no hay relevo, no hay transportistas jóvenes porque las condiciones laborales no son nada buenas. Es necesario regular la edad de jubilación del sector desde el punto de vista de la seguridad, como se suele hacer en otros oficios, situándola en los 60 años.
Y que al producirse los fallecimientos no se intente reducir las estadísticas oficiales de accidentes laborales. Que la Administración no los considere muertes naturales o siniestros de tráfico por carretera. Son, claramente, accidentes de trabajo. Se producen cuando el o la transportista estaba trabajando.
El sector industrial ha dejado 19 muertes en lo que va de año, superando la cifra del año pasado. Como venimos denunciando en los últimos años, muchos de esos accidentes se producen porque no se cumple la normativa de máquina herramienta, este año 7 muertes. Un año más, se han producido accidentes graves por atropello y golpes, y todos ellos han sido casos de incumplimiento de la normativa de maquinas. La realidad es que nadie controla que la normativa se cumpla correctamente, en la práctica queda en manos de la voluntad de la empresa. Para hacer una comparación, no existe la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en las máquinas, como ocurre con los vehículos. Esto conlleva que un número enorme de máquinas presentes en nuestro tejido industrial, no pasaría la ITV. Conclusión, el incumplimiento lo pagamos con nuestra vida.
En la industria también es reseñable la incidencia de los accidentes no traumáticos y su relación con el trabajo, tal y como se ha mencionado en el párrafo anterior.
La construcción ha dejado 11 muertes en Euskal Herria en 2024, el doble que en 2023. Así, los datos de 2024 interrumpen la tendencia a la baja que mostraban los de 2023. Los datos del año pasado mostraban un descenso en la mortalidad y no en el accidente acumulado del sector. Las muertes en la construcción suelen estar directamente relacionadas con las caídas en las alturas y en lo que va de año las caídas han dejado 11 muertes. La construcción, junto con la silvicultura y el transporte, se encuentra entre los sectores más mortíferos.
La agricultura y la pesca han dejado 5 muertes. En cuanto a la agricultura, un accidente se debe al vuelco de un tractor y otros dos, en desplazamientos por pistas de tierra a huertas del sur de Navarra. Detrás de los accidentes de tractores suele haber falta de mantenimiento, prevención y escasa formación, subestimando los riesgos de esta herramienta de trabajo. Los accidentes que se producen en el camino hacia las huertas tienen principalmente un componente la precariedad, vehículos no aptos, con un mantenimiento deficiente, en terrenos resbaladizos. Hace 3 años, un trabajador de las huertas del sur de Nafarroa falleció al ser atropellado por un coche cuando circulaba en bicicleta; como hemos dicho, el sector tiene la precariedad como principal factor de riesgo.
El número de trabajadores y trabajadoras fallecidas en las carreteras (in itinere/in misión) ha aumentado en 2024, hemos tenido conocimiento de 15 muertes. Muchos de estos accidentes se producen en Nafarroa, tal y como denunciamos el pasado 28 de abril con una acción en la Plaza del Castillo de Iruñea. La centralización que se da en Nafarroa genera un gran número de desplazamientos diarios, creando las condiciones para el gran número de accidentes laborales en carretera. La centralización obedece a una decisión política demoledora, que afecta a pueblos y valles, rompiendo el carácter diverso de la propia Nafarroa. Los sindicatos planteamos una batería de medidas para prevenir este tipo de accidentes, aunque no se haya dado ninguna respuesta por parte del Gobierno, hasta hoy.
ELA, LAB, ESK, Steilas, Hiru y Etxalde abren el camino a favor del salario mínimo propio
Para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora, hacer frente a la precariedad y generar cohesión social, la mayoría sindical vasca ha abierto el camino a favor del salario mínimo propio, registrando la Iniciativa Legislativa Popular y extendiendo la petición para un Acuerdo Interprofesional.

Los sindicatos ELA, LAB, ESK, Steilas, Hiru y el movimiento Etxalde han iniciado su andadura en favor de un salario propio para los trabajadores de Hego Euskal Herria, tanto con el registro de la Iniciativa Legislativa Popular como con la petición de un Acuerdo Interprofesional, tanto en la CAV como en Navarra.
En una rueda de prensa han recordado que en los últimos años ha habido numerosas iniciativas sociales y sindicales en defensa de los derechos sociales, entre ellos, pensiones y salarios dignos. El salario mínimo y las pensiones fueron dos de las principales reivindicaciones de los agentes sociales y sindicales durante la huelga general de 2020.
Después de cinco años, han retomado el timón tanto los sindicatos como el movimiento de pensionistas. Por ello, los sindicatos ELA, LAB, ESK, Steilas, Hiru y el movimiento Etxalde se suman a la Iniciativa Legislativa Popular presentada por el movimiento de pensionistas para equiparar las pensiones al salario mínimo y recogerán firmas.
"El salario mínimo en España es muy bajo y no responde a la estructura socioeconómica de Hego Euskal Herria ni a la voluntad diferenciada que han mostrado los trabajadores tanto en las elecciones sindicales como a través de la movilización. El salario mínimo debería ser un instrumento de reparto de la riqueza y de reducción de la pobreza, pero el salario mínimo español no cumple esa función", explican.
Aquí, salarios mínimos mucho más bajos
Según han señalado, en países con una estructura socioeconómica similar a la de Hego Euskal Herria los salarios mínimos fueron muy superiores en 2024: 2.054 euros en Alemania, 2.230 euros en Gran Bretaña, 2.070 euros en Bélgica, 2.570 euros en Luxemburgo, 2.134 euros en Holanda, 2.134 euros en Irlanda o 2.493 euros en Islandia (12 pagas anuales). "Es inaceptable que el actual salario mínimo de los trabajadores de Hendaia sea de 1.802 euros y el de los trabajadores de Irun de 1.303 euros (la cantidad del SMI español que se reparte en 14 pagas, repartida en 12 mensualidades)", añaden.
Por ello, los sindicatos han puesto en marcha dos iniciativas, una complementaria a la otra. La Iniciativa Legislativa Popular presiona a la patronal para que negocie el Acuerdo Interprofesional, ya que de lo contrario puede venir una regulación legal. Y el Acuerdo Interprofesional puede abrir la vía al traspaso de la competencia.
Los sindicatos quieren que la propia recogida de firmas sea una movilización gigante, y en función de la respuesta de los otros agentes en cada etapa, organizarán nuevas movilizaciones.
En este sentido, exigen a la patronal que "negocie de buena fe". Piden a las instituciones que "abandonen las distancias y hagan frente a una patronal que favorece la precariedad de los trabajadores y trabajadoras, y que garanticen en sus ámbitos de responsabilidad un salario mínimo suficiente para el personal de las administraciones y para el personal subcontratado". Por último, han pedido a los partidos políticos que se comprometan a apoyar la Iniciativa Legislativa Popular.
Los sindicatos interpelarán a instituciones y patronales en defensa del derecho colectivo a los cuidados
Los sindicatos EHNE Bizkaia, LAB, Steilas, ESK, Hiru y el movimiento Etxalde han exigido en la comparecencia de Denon Bizitzak Erdigunean la mejora de las condiciones del personal de cuidados, el fin de la privatización y la reducción de la jornada laboral.
[berria]«Histórico». Así fue el 30 de noviembre del año pasado. Aquel día, el movimiento feminista de Euskal Herria llamó a la huelga feminista general y tomó las calles en defensa del derecho colectivo a los cuidados. Aunque fue un hito, aquel día no acabó nada. Muestra de ello fue la comparecencia ayer, de cara al aniversario de la huelga, de la plataforma Denon Bizitzak Erdian. A la cita han asistido LAB, Steilas, ESK, EHNE Bizkaia, Etxalde e Hiru, quienes han dejado clara su intención de seguir luchando: "Nos comprometemos a seguir haciendo una aportación sindical en la lucha por el derecho colectivo a los cuidados". Para ello, interpelarán a instituciones y patronales.
Los sindicatos denuncian la "irresponsabilidad" de las instituciones al decidir seguir profundizando en el modelo de privatización y negocio. Ante ello, se comprometen a llevar a la negociación colectiva una serie de medidas urgentes. De hecho, señalan la necesidad de marcar la agenda para dar pasos en el ámbito del empleo hacia un sistema de cuidados público y comunitario que ponga las vidas en el centro.
Entre otras medidas, exigen que no se privaticen más servicios públicos y que se hagan públicos los que actualmente están privatizados. "Y la eliminación total del ánimo de lucro", añaden. También consideran necesario poner recursos en los servicios y garantizar el equilibrio entre territorios históricos.
La reducción de jornada también ha sido considerada imprescindible por los sindicatos presentes en la comparecencia. Quieren que, hasta alcanzar la jornada de 30 horas, la bajada sea "progresiva" y "significativa", sin bajadas salariales. Gracias a ello, la vida sería "más habitable". El objetivo de la reducción es también que los hombres asuman responsabilidades "para repartir corresponsablemente las tareas de cuidados".
Las actividades que se realizarán en Bilbao.
En cuanto a las personas que trabajan en los cuidados, piden que se mejoren sus condiciones laborales: por un lado, mejorar los convenios y crear nuevos en las zonas que no existen, evitando desequilibrios territoriales; por otro, bajar los ratios. "Para mejorar las condiciones tanto de los usuarios como de los trabajadores" hay que renovar y mejorar los decretos y poner más recursos.
"Para que los hombres renuncien al privilegio de no cuidar y se responsabilicen de las tareas de cuidados", otra medida urgente es mejorar los permisos y establecer una conciliación que "no perpetúe la actual situación opresiva". Para ello, entre otras cosas, hay que garantizar las sustituciones en las reducciones de jornada en sectores feminizados y no puede haber penalización en la cotización. También proponen que los permisos de cuidados puedan obtenerse fuera de la familia nuclear.
Reforzar los servicios públicos
Las organizaciones LAB, Steilas, ESK, EHNE Bizkaia, Etxalde e Hiru han dejado claro que la base es "reforzar los servicios públicos". Exigen mayores inversiones para conseguir servicios sociales, vivienda y un sistema sanitario público, universal y eficiente. Es más: "Si queremos revertir la situación de los cuidados, sin duda la concienciación y la educación son las herramientas más eficaces". Por ello, en referencia al sistema educativo, han hecho varias reivindicaciones: consensuar, actualizar y desarrollar los planes de igualdad; incorporar los cuidados en el currículum; y establecer los recursos necesarios para que haya planes estables y de calidad para la coeducación en todos los centros.
Además de dar a conocer las medidas, en la comparecencia han hecho un llamamiento a la ciudadanía para que participe en las movilizaciones que el movimiento feminista ha organizado para el sábado, 30. En Bilbao se celebrará el Pueblo de los Cuidados, y en Vitoria-Gasteiz, una kalejira. En Pamplona, por su parte, se organizarán una serie de encuentros, y en Donostia, una concentración. También habrá movilizaciones en otras regiones.
Sindicatos y Etxalde reclaman medidas para cuidar la salud de las y los trabajadores forestales
Los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, Hiru y el movimiento Etxalde han denunciado hoy frente a la sede de la Diputación de Gipuzkoa en Donostia la falta de medidas en el sector forestal que llevan a padecer una tasa "inaceptable" de accidentes laborales. Han reclamado, asimismo, el cambio del actual modelo de explotación forestal.
En los últimos años la silvicultura ha registrado altas tasas de mortalidad. Este sector es entre 10 y 15 veces más mortífero que la propia construcción a la vista de su plantilla (serán escasamente 1.000 trabajadores en Euskal Herria). Una de las razones fundamentales es la profunda precariedad existente en este sector; a modo de ejemplo, hasta 2018 en este sector muy pocos trabajadores estaban dados de alta en la CNAE correspondiente, pero tras una campaña de inspección el número de trabajadores dados de alta aumentó repentinamente de forma considerable. Esto no quiere decir que el número de trabajadores aumentara, sino que muchos de los trabajadores que trabajaban fueron dados de alta.
Es evidente que la actividad presenta riesgos inherentes, pero el modelo forestal, concretamente el forestal intensivo, los incrementa considerablemente. En Euskal Herria, este modelo se da sobre todo en la vertiente cantábrica, desde la posguerra (1940), por lo que es muy reciente en términos históricos. Las especies foráneas se modifican, crecen y salen en forma de matarrasas en ciclos cortos de tiempo. Las cortas a matarrasa son una técnica de aprovechamiento forestal que consiste en la tala de todos los árboles de una determinada área forestal, incluyendo aquellos que tienen poca calidad maderera, y la posterior quema de los residuos y restos de la tala.
Para ello se utiliza maquinaria pesada, y en el monte se abren pistas para poder sacar leña. Además, las intervenciones se realizan frecuentemente en pequeñas, raras y remotas zonas privadas, reduciendo las posibilidades de llevar una adecuada planificación de trabajo.
En las últimas décadas ha fracasado desde el punto de vista económico, ya que ha dilapidado millones de euros públicos en subvenciones por el camino, mientras que desde el punto de vista de la biodiversidad ha transformado nuestras tierras de montaña, ha sesgado masivamente sus bosques y especies y, asimismo, los matarrasas y la transformación del hábitat han atacado gravemente a la fauna autóctona. Y más aún desde el punto de vista de la salud laboral. De hecho, cuando la explotación intensiva del bosque debería realizarse en llanura o en terrenos lisos, al traer estas técnicas a nuestros terrenos escabrosos el factor de riesgo alcanza límites inaceptables.
En los últimos tres años han muerto 9 trabajadores en el bosque, 8 de ellos en el intensivo.
La falta de viabilidad económica hace que las horas de trabajo se realicen de forma masiva (7:00-19:00) y también los sábados; por la misma razón se utiliza maquinaria vieja e inadecuada en los grandes declives y los ritmos de trabajo son muy altos debido al escaso valor del material explotado. Las medidas preventivas no se aplican, los trabajadores trabajan de forma aislada, no hay recursos preventivos, la falta de formación es evidente y, en general, no se respeta la normativa laboral. Estos factores, que se suman a los riesgos inherentes al trabajo, son los causantes de la alta siniestralidad.
Hay que cambiar el modelo forestal
Las organizaciones convocantes de la concentración han hecho un llamamiento a la Diputación Foral de Gipuzkoa y a las Juntas Generales para que modifiquen las normas forales de montes, en defensa de una silvicultura sostenible y contra el modelo intensivo, que garantice la viabilidad económica, la biodiversidad, y con ello la salud laboral y las condiciones laborales.
Hasta que estas políticas forestales se modifiquen y se hagan efectivas, proponen:
- Es necesario equilibrar la ocupación del territorio teniendo en cuenta las necesidades de la actividad alimentaria. En consecuencia, consideramos necesario utilizar para la producción de alimentos superficies de tierra con pendientes inferiores al 30% en el menor plazo posible.
- Prohibición de la silvicultura intensiva en suelo público, con el consiguiente abandono de talas y matarrasas.
- Realizar una zonificación en el terreno privado en función de los riesgos, donde la pendiente sea determinante y las superficies de terreno con pendiente superior al 60% se destinen a bosque autóctono, estableciendo un nivel de conservación del 50% y dejando a un lado los rasantes.
- Durante el cambio de modelo las Diputaciones condicionarán las autorizaciones "saka":
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- Control preventivo de la desforestación de recursos desde el Departamento
- Delimitar e inspeccionar el horario - "franja horaria" - ficha.
- Presencia de recursos preventivos (sólo para ello)
- Garantizar el tipo de contratación, controlando que no haya fraude.
- La Diputación se coordinará con Osalan para que los agentes forestales reciban formación directamente por parte de los técnicos de Osalan.
Los sindicatos y Etxalde se manifiestan contra el «discurso falso» de Confebask sobre el absentismo laboral
Los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde se movilizaron ayer en Bilbao desde la Plaza Elíptica hasta el hotel The Artist, donde Confebask celebra unas jornadas bajo el título «Revisión y análisis del absentismo laboral en Euskadi». Las organizaciones denunciaban así el "discurso falso" de la patronal vasca sobre el absentismo laboral.
A su llegada al hotel en la que se ha celebrado la jornada organizada por Confebask, las y los trabajadores que han participado en la movilización han realizado una sentada en el suelo y han dedicado una sonora pitada de un minuto a los participantes en la jornada de la patronal.
Además, han reclamado al Gobierno que no asuma el falso discurso de la patronal y censurado que el vicelehendakari de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres, haya participado en las jornadas organizadas por Confebask.
Llevamos meses ante una campaña de la patronal "perfectamente orquestada" que tiene un mensaje muy claro: «Las y los trabajadores cogemos bajas porque somos unos vagos y vagas y nos aprovechamos de otro tipo de permisos porque no queremos trabajar». La jornada organizada por Confebask es "una nueva iniciativa para reforzar ese discurso" en torno al absentismo.
El absentismo incluye cuestiones como bajas, permisos de maternidad o paternidad, licencias, huelgas, actividad sindical, etc.
Representantes de los convocantes acusaron a la patronal de protagonizar una campaña de «fake news». Según explicaron, las empresas y sus mutuas han impulsado durante años diferentes medidas contra el absentismo, como dejar en manos de las mutuas el control de las bajas ordinarias o utilizar empresas especializadas para fiscalizar las bajas ordinarias. Todas estas medidas -subrayaron- sólo han supuesto un aumento del absentismo, y las empresas saben que, garantizando la prevención, con la creación de puestos de trabajo salubres, el número de bajas bajaría de forma notable.
Detras de esta campaña de Confebask hay una "actitud contraria a los derechos conquistados durante años por las y los trabajadores a través de su lucha, y lo que busca la patronal es la reducción de permisos, licencias, etc". Según explicaron, también se pretenden eliminar las competencias de las y los médicos de familia ante las bajas ordinarias para enviar a las y los trabajadores a sus puestos incluso estando enfermos o enfermas. «Por lo tanto, la idea es incrementar su poder y eso es lo que hay detrás de todo esto. Para ello les es imprescindible debilitar la salud pública».
"No hay problemas de fraude con las bajas, sino una patronal que no respeta la normativa de salud laboral, que entiende los derechos laborales y sociales como un problema y que está utilizando contra ellos toda su maquinaria y poder. Para ello, recurre a medios de comunicación, políticos e instituciones, intentando evitar, de forma permanente, que los derechos se desarrollen y que estos se conviertan en estables".
Los datos muestran la realidad
Ante el mensaje que está lanzando la patronal, también dieron a conocer varios datos reales:
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- A nivel europeo, el Estado español se sitúa entre los cinco países con menor absentismo.
- En el Estado español, el fraude en las bajas ordinarias (simular enfermedad para obtener la baja) se sitúa en el 4%, y el presentismo (ir al trabajo enfermo, enferma o lesionada y lesionado) en el 41%.
- En Hego Euskal Herria, el absentismo es más alto que en otros territorios del Estado español por el mayor peso de la industria (por lo que se producen más accidentes laborales), por las mayores conquistas sociales derivadas de la alta sindicalización, por la mayor conflictividad sindical y un mayora número de huelgas, por el mayor envejecimiento medio de la clase trabajadora, por el mayor número de mujeres en el mundo laboral remunerado, por el mayor ejercicio de los derechos, etc. Esto no es negativo, sino reflejo de una sociedad más desarrollada y, sin embargo, aún quedan muchos pasos por dar para llegar a la media de derechos de la Unión Europea.
En 2023 se comunicaron 100.000 accidentes laborales en Hego Euskal Herria, de los que la mitad causaron más de un día de baja. En 2024 se han registrado al menos 51 muertes laborales en Euskal Herria desde principios de año. Estas cifras indican que los empresarios "no hacen prevención, pero esta situación no preocupa a la patronal ni a las instituciones; no hay cultura preventiva y tampoco voluntad política de hacer cumplir la ley de prevención".
Los sindicatos y Etxalde se movilizan contra las 50 muertes por accidentes laborales en 2024
Los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde han colocado pancartas de grandes dimensiones en Bilbo (Puente Pedro Arrupe), Donostia (Muelle) y Gasteiz (Virgen Blanca) con el siguiente lema: «50 trabajadoras y trabajadores han muerto en Euskal Herria en 2024. La patronal y las instituciones nos enferman y nos matan». Además, la intersindical formada por las organizaciones citadas se concentrará mañana, jueves, 31 de octubre a las 12:00 horas en Bilbo ante la sede de la patronal Confebask (Gran Vía, 50).

Donostia

Gasteiz

Bilbo
La mañana de ayer, Osalan informó de que el trabajador de 59 años R.I.U, herido de gravedad en la empresa Maderas Etxeari de Zornotza tras caerse desde una altura el pasado 15 de octubre, falleció en la tarde del pasado viernes, 25 de octubre, a causa de las heridas producidas. El trabajador llevaba 14 años trabajando en la empresa de Dana-Air Aire Comprimido.
Asimismo, fuentes de Osalan también informaron de que el pasado 17 de octubre, el trabajador L.M.B.A., de 52 años, sufrió un accidente grave en Zierbena como consecuencia de una proyección provocada por el motor de una máquina, que lo hirió de forma grave en la cara. Ayer, este trabajador que llevaba más de 5 años trabajando en la empresa Viuda de Sainz, falleció a consecuencia de las heridas sufridas
La lista negra anual que provoca la patronal acumula ya en este 2024 50 muertes. Entre ellas las caídas en las alturas cobran, un año más, un gran protagonismo. Las medidas de seguridad a aplicar para evitar riesgos en alturas son de sobra conocidas. Detrás de cada uno de estos accidentes se esconde siempre "la dejadez criminal de las empresas, que, por imperativo legal, deberían articular una serie de medios para garantizar en todo momento la aplicación de las diferentes medidas de seguridad. Algo que, sistemáticamente, no hacen".
También abundan los accidentes graves y mortales provocados por máquinas, aunque la normativa para protegerse de ellas es muy estricta. En la práctica, las empresas "incumplen de forma habitual la normativa de seguridad de las máquinas, sin que les suponga ningún obstáculo. La impunidad es intolerable".
Esta "dejadez criminal" ha provocado que en los últimos 10 años, en Euskal Herria, al menos 82 trabajadoras y trabajadores hayan muerto por caídas de altura, la mayoría en el sector de la construcción. Con esta nueva muerte, son 10 las muertes en el trabajo ocurridas en Euskal Herria desde inicio de año por esta causa.
"Esta situación no sería posible si no hubiera complicidad institucional. Porque, como venimos denunciando, no poner medios para no obligar a la patronal a que cunpla con la normativa no es un problema administrativo, sino una decisión política".
Los sindicatos vascos y Etxalde exigen a las instituciones que dejen de ser «cómplices del apartheid» en Palestina
Los sindicatos ELA, LAB, CCOO Euskadi, CCOO Navarra, UGT Euskadi, UGT Navarra, ESK, CGT-LKN, STEILAS, SOLIDARI, EHNE Nafarroa, Hiru y el movimiento Etxalde se han movilizado hoy junto a la iniciativa ciudadana Gernika-Palestina en Iruñea, Bilbao, Gasteiz, Donostia y Tudela para exigir que cese el genocidio en Palestina.
Comunicado conjunto de Sindicatos y Gernika-Palestina
En octubre se cumple un año desde que comenzó la última y enésima escalada de violencia de Israel contra el pueblo palestino, escalada bélica que se inició en Gaza y que se extendió rápidamente a todos los territorios palestinos. Palestina sufre un auténtico genocidio con la impunidad de los Estados Unidos, la Unión Europea y buena parte de la comunidad internacional. Esta guerra total contra el pueblo palestino ha costado la vida a más de 42.000 palestinos y palestinas, la mayoría de ellos menores. La violencia contra la comunidad palestina en Jerusalén y Cisjordania y los crímenes de guerra de Israel están siendo constantes, y el mundo está viendo este genocidio en riguroso directo.
Nada legitima ocupar territorio ajeno, ni las crueles consecuencias de las guerras, ni la destrucción, reclusión y negación de toda una población. En 2024, sin embargo, estamos siendo testigos de uno de los genocidios más crueles jamás cometido y, sin embargo, la comunidad internacional no logra frenar ese horror. Y decimos horror, ya que bastan dos datos para visibilizar el alcance del genocidio palestino: el ejército israelí, el Estado de Israel, ha matado ya a 42.000 palestinas y palestinos, y ha destruido el 70 % de las calles e infraestructuras de Gaza. Dos datos que nos sirven para afirmar que nos hallamos ante una nueva Nakba de graves consecuencias sociales y políticas. Atacando al Líbano, Israel ha dado un paso más que provocará miles de víctimas y más destrucción. Ha provocado una espiral que no sabemos dónde ni cómo acabará.
Palestina necesita de nuestra solidaridad, pero sobre todo necesita soluciones. No podemos dejar sola a Palestina. El pueblo palestino tiene derecho a soñar, a decidir su futuro, a ser libre y a vivir con dignidad. Por eso es urgente encontrar soluciones a este genocidio que dura demasiado tiempo. En este sentido, hay que abrir vías diplomáticas para lograr un alto el fuego inmediato y una resolución política integral que ponga en el centro tanto el fin de la colonización y la ocupación de Palestina como los derechos nacionales del pueblo palestino.
Es necesario que se ponga fin a esta brutalidad y es por ello que pedimos que se acabe con la complicidad con quien viola los derechos humanos. Pedimos a la clase trabajadora a que sigamos activando todas las medidas de presión para conseguir que Israel respete las resoluciones de las Naciones Unidas y se pueda llegar a un escenario de paz y estabilidad en la región. Además, exigimos a las instituciones que dejen de ser cómplices del apartheid, de los crímenes de lesa humanidad y del genocidio que sufre el pueblo palestino.