Los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde han convocado una jornada de movilizaciones el 28 de abril, Día Internacional de la Seguridad y la Salud Laboral, bajo el lema ‘El absentismo, el fraude patronal. La salud laboral, nuestro derecho". Las manifestaciones se desarrollarán en Donostia (11:30, Alderdi Eder) y Pamplona (11:00, Paseo Sarasate).

Según los sindicatos, los datos muestran que el absentismo es "una cortina de humo" y que el principal problema lo constituyen los riesgos laborales, que "son causados por la patronal vulnerando la ley". Estos riesgos afectan gravemente a la salud de las y los trabajadores, con 64 muertes y 102.000 accidentes traumáticos en 2024.
Han realizado el anuncio en Gasteiz, en las puertas del Parlamento. De hecho, la intersindical de salud laboral ha presentado allí el informe sobre siniestralidad laboral de 2024.
Han señalado que, en 2024, las empresas y las mutuas reconocieron 102.000 accidentes laborales y que la mitad de estos causaron baja. Han concretado que muchos de los accidentes laborales no se reconocen.
Los gobiernos -afirman- ocultan datos sobre accidentes laborales mortales, siendo los más habituales los de transportistas o accidentes de tipo in itinere o in mision, que en muchas ocasiones no se consideran como accidentes laborales.
Muchos de estos accidentes y muertes son conocidos por los sindicatos gracias a su red de afiliados y afiliadas. Así, los sindicatos contabilizaron 64 muertes en el trabajo en 2024 y los datos oficiales registraron 27. En palabras de los sindicatos, esto demostraría que los datos oficiales "no se pueden tomar con seriedad".
El fraude de la patronal
Los sindicatos también han subrayado que durante el último año se ha observado una nueva práctica perversa de las mutuas, consistente en no aceptar los accidentes traumáticos reconocidos y comunicados por las empresas.
Según han manifestado, en algunos sectores, como el forestal, la construcción, la industria o el transporte, es más fácil morir, mientras que en otros es más sencillo desarrollar enfermedades profesionales, y entre éstas las afecciones psicosociales son cada vez más destacadas. En este sentido, la situación más grave la sufren los sectores feminizados. "Unos trabajos matan, y otros no dejan vivir", han sentenciado.
En lo que respecta a las enfermedades profesionales, las y los médicos de las asociaciones empresariales que son las mutuas son quienes deciden, en primera instancia, si el origen de esa enfermedad que sufre el trabajador o trabajadora es laboral o común. La actitud de las mutuas "causa el vergonzoso subregistro de enfermedades profesionales".
Los sindicatos han destacado que la patronal lleva casi 30 años "incumpliendo" la normativa de salud laboral vigente "con total impunidad". "El entramado institucional fue creado para proteger esa impunidad, porque los gobiernos no sancionan y la patronal lo sabe perfectamente". El mensaje dirigido por los gobiernos a la patronal sería claro: “Seguid así, porque no va a ocurrir nada”.
En este "fraude", el papel de las mutuas es fundamental, ya que "aprovechan la impunidad de la patronal y el trabajo estéril de las instituciones". Así, el reflejo de los caros planes que llevan a cabo OSALAN y el ISPLN no aparece en ningún sitio.
Ante esta grave situación, los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, EHNE, HIRU y el movimiento Etxalde han avanzado que seguirán dando pasos. Del mismo modo, han exigido a los gobiernos que pongan recursos reales para hacer cumplir la normativa a la patronal.