[Fueron adoptadas en Marzo 2014] La Asamblea parlamentaria Euro Latinoamericana (ver recuadro) ha aprobado este 29 de marzo 2014 en su reunión de Atenas 3 resoluciones que son relevantes para las relaciones Unión Europea – América Latina.

[01] El comercio de materias primas entre la UE y América Latina.

[02] El feminicidio en la Unión Europea y en América latina.

[03] Seguridad alimentaria desde la perspectiva Unión Europea – América Latina.

Estas resoluciones son el fruto de un trabajo de largo aliento de la sociedad civil desde el 2011 con el apoyo de parlamentarios de ambas regiones (ver detalles del proceso).

La próxima reunión de comisiones será en Panamá y se prevé que la plenaria del próximo año se lleve a cabo en Bruselas a principios o mediados de 2015. Luego de haberse abierto el espacio de diálogo en el 2011 y ver logros tangibles en 2014, se espera poder continuar fortaleciendo el diálogo entre EUROLAT y la sociedad civil. Se espera asimismo continuar con los esfuerzos por una relación bi-regional más simétrica, con el objetivo último de consolidar la legitimidad de este espacio de la asociación bi-regional, en la perspectiva reiterada por el Consejo de la UE en sus conclusiones del 2012: “una sociedad civil empoderada, en toda su diversidad, representa un crucial e integral componente de cualquier democracia y constituye un valor añadido en si mismo”
Este documento no es una lectura crítica de estas resoluciones sino más bien en clave de que contienen estas resoluciones que podemos utilizar para el trabajo de incidencia al nivel nacional y regional.

Resúmen y principales apartados de las resoluciones:

[01] El comercio de materias primas entre la UE y América Latina.
Es una resolución con bastantes elementos que se pueden utilizar para trabajar por un modelo de desarrollo diferente al modelo extractivito actual. (ver texto)

La resolución pide una transición hacia un modelo más justo y sostenible que incluya estándares de derechos humanos, laborales y medioambientales, que permita la diversificación de la economía y el incremento del valor añadido a los recursos en América Latina, que promueva el reúso y el reciclaje .
No solo pide la redistribución de las ganancias lo que ya es el caso en el modelo neo-extractivista en Bolivia y Ecuador, sino también la democratización de la governancia de los recursos naturales y una cooperación reforzada para la transferencia de tecnologías así como una revisión de las políticas impositivas y de regalías que permitan la transición hacia matrices productivas sustentables.

01.01. La definición del problema: comercio injusto y extractivismo destructivo.
01.02. Transformación hacia un modelo diferente.
01.03. Democratización de la governancia de recursos naturales.
01.04.Integración de derechos humanos, laborales y de protección del medioambiente en inversiones, producción y comercio.
01.05. Mecanismos de control exigidos.
01.06. Acceso a la justicia exigido.

[02] El feminicidio en la Unión Europea y en América latina.
El origen de esta resolución radica en la inclusión de un capítulo sobre género en el Plan de Acción EU-CELAC 2013-2015 adoptado por la Cumbre de Santiago de Chile en enero de 2013. Este capítulo prevé la creación de un espacio de diálogo birregional sobre género que integra la eliminación de todas las formas de violencia contra las mujeres y el feminicidio como uno de sus tres ejes. Este eje incluye la promoción de acciones y el intercambio de experiencias sobre las mejores prácticas y las medidas más efectivas para combatir el fenómeno, así como la promoción de medidas concretas para la investigación de los asesinatos por razones de género. (ver texto)

En este contexto, dos miembros de la Asamblea Parlamentaria Unión Europea y América Latina (EuroLat), Gloria Flores, parlamentaria Andina y Raül Romeva i Rueda, miembro del Parlamento Europeo, iniciaron el proceso de elaboración de la Resolución sobre feminicidio en la UE y en América Latina (AL) que fue aprobada por los parlamentarios en la sesión de EuroLat de marzo 2014 en Atenas.
Esta resolución es el primer documento oficial que indica que el feminicidio existe no sólo en América Latina, sino también en Europa. Esto representa un paso importante en la lucha contra este fenómeno global. La resolución pide la formulación de políticas públicas a partir de una perspectiva de género y además la adopción de medidas para acabar con la impunidad.

02.01. Información estadística oficial, completa y accesible.
02.02. Justicia efectiva.
02.03. Políticas públicas con perspectiva de género.
02.04. Diálogo Político Bi regional y transparencia

[o3] Seguridad alimentaria desde la perspectiva Unión Europea – América Latina.
La resolución pide poner en el centro de las políticas el derecho humano a la alimentación e implementar políticas públicas para garantizar la seguridad y la soberanía alimentaria. Frente a la naturaleza estructural de los cambios en la oferta y la demanda de los alimentos, que tienen consecuencias muy negativas en la población, ve necesario poner freno a la especulación de los mercados financieros y de productos agrícolas. Además, alerta sobre el crecimiento exponencial de la adquisición de tierras agrícolas a gran escala en la región y sus consecuencias en el acaparamiento de tierras, destacando la necesidad de devolver el control de los cultivos a los agricultores. Las semillas privadas y los transgénicos, se dice, representan un serio riesgo no sólo a nivel medioambiental, sino también para la seguridad y la soberanía alimentaria. (Ver texto)
La resolución subraya que en la actualidad “842 millones de personas en el mundo están subalimentadas, 98% de los cuales viven en países en desarrollo”. Considera necesario el cumplimiento del derecho humano a la alimentación, instando “a los Gobiernos a integrar la seguridad y la calidad alimentaria en sus políticas y a garantizar la coherencia entre sus políticas agrícola, comercial, energética y de desarrollo, de tal forma que las políticas que tuvieran un impacto negativo en el derecho humano a la alimentación podrían revisarse y modificarse conforme con los requisitos de este derecho” .
En cuanto a las semillas, considera que “la privatización de las semillas, a través mecanismos de certificación, es una amenaza para la desaparición de las semillas tradicionales, criminaliza a los campesinos impidiéndoles de reproducir prácticas milenarias y además atenta contra la soberanía y la seguridad alimentaria”. Además, “recomienda profundizar en políticas de adaptación de la producción y el consumo de productos básicos, favoreciendo el cultivo de aquellas variedades mejor adaptadas a las necesidades alimenticias de la población local, pero también de las condiciones climáticas, del terreno y de las prácticas ancestrales”.
Respecto a los transgénicos “subraya el riesgo que representan los transgénicos tanto para la salud humana, como para la degradación de los terrenos agrícolas y los cultivos vecinos” .
La resolución insiste en la lucha contra la especulación y el control de precios de los alimentos. Así, muestra su preocupación con la “cada vez más estrecha vinculación entre los mercados agroalimentarios y los mercados financieros debido a su desregularización” , e insta a las autoridades a “que garanticen que no se opera con fines especulativos en los mercados de futuros de productos agrícolas ni en los mercados de productos agrícolas al contado”. Además, subraya la necesidad de “regular el comercio de alimentos con vistas de alcanzar la soberanía alimentaria, limitando las exportaciones a precios dumping y las importaciones de alimentos que se pueden
producir a nivel local”.
Respecto al acaparamiento de tierras, constata que la “adquisición de tierras agrícolas a gran escala ha crecido de manera exponencial durante los últimos años en América Latina” y “a menudo tiene como consecuencia la pérdida de acceso a la tierra de la población autóctona y la concentración, acaparamiento y extranjerización de las tierras, amenazando la seguridad alimentaria”.
Asimismo se recalca que existen desequilibrios en “la cadena alimentaria, como consecuencia de prácticas comerciales abusivas” y “que los productores primarios suelen ser las primeras víctimas de dichos desequilibrios” . La resolución también señala que algunos efectos de los acuerdos internacionales bilaterales “están poniendo en riesgo la viabilidad de explotaciones agrícolas europeas y latinoamericanas, lo que puede conducir a un abandono creciente de la actividad agrícola, afectando principalmente a los pequeños productores en detrimento de las producciones agroindustriales asociadas a los pequeños productores”, e “insta a la Comisión Europea a que en
la negociación de los acuerdos bilaterales entre la UE y los países de América Latina vele por negociar concesiones mutuas equilibradas que no pongan en riesgo la viabilidad de los agricultores de ambas regiones” .
Respecto a los agrocarburantes “destaca la necesidad de priorizar el alcance de la seguridad alimentaria” y “limitar el desarrollo de los agrocarburantes elaborados a partir de materias primas, para que no interfiera en la producción de alimentos y en los mercados de alimentos, como también en la degradación de los suelos para el cultivo”.
Finalmente, la resolución apoya la participación de la sociedad civil en la búsqueda de soluciones, recomendando que “ambas regiones lleven a cabo procesos de consultas con los distintos sectores de la sociedad civil y particularmente con las organizaciones agrícolas de productores y consumidores, sindicatos, poblaciones locales y los pueblos indígenas” .

Foto Cabecera: Protesta contra el feminicidio. Liliana Zaragoza Cano CC-By-Nc-Nd