«El campesino se podía permitir el lujo de ser autónomo. Luchamos por cumplir el rol histórico del campesinado que siempre ha producido alimentos para las personas, no para “los mercados”. Pero el estado al servicio del capital ataca los modelos autónomos e indepedientes de los grupos de poder. Hay un choque brutal de intereses, un engaño en nombre de la rentabilidad. Quieren eliminar a los representantes de la autogestión del territorio y...