«Unos van sembrando mies y otros sembrando dinero, unos crecen con lo vivo y otros crecen lo muerto…» 

«Durante 49 años hemos amado y cuidado este pedazo de de tierra… pero ahora van a aplastarlo todo+ en un día» [Agustín Beroiz]

Este emocionante vídeo relata el último día de un huerto milenario, avasalando a ciudadanos que defendían el proyecto. Agustín Beroiz en los últimos días del huerto tras las explopiaciones cedía la producción al auzolan, colaborando para que los frutosde su generos tierra y con su generoso consejo fuesen a proyectos populares.

En las campañas electorales piensa en quienes defienden la tierra, el agua, las semillas y a las manos de nuestros baserritarras recias que cuidan cada tormo de tierra y nos hacen crecer con lo vivo. Quienes hablan sin falsos postureos de agricultura familiar, de soberanía alimentaria, alertando contra el TTIP, quienes saben que para enfriar el planeta necesitamos un mundo rural vivo, huertos urbanos, economía alternativa.

Hay votos cotidianos, más allá de las campañas electorales. Cada acto de consumo transformador es un voto activo por un modelo de sociedad y de economía para las personas. Apuesta por el kilómetro cero, los circuitos cortos, elige tiendas familiares, venta directa en ferias y mercados, productos frescos y de temporada, productos y servicios de empresas y cooperativas de economía solidaria…

Y en las elecciones. Desconfía de quien se olvide del mundo rural y desconozca la soberanía alimentaria o de quienes voten en Europa a favor del TTIP y defiendan aquí “lo de casa”. Recuerda a Agustín Beróiz, las huertas de Aranzadi, recuerda el poema del hortelano…