El País Vasco es un pueblo estrechamente ligado al mar Cantábrico y a la pesca. El mar ha formado parte de nuestra historia, de nuestra cultura y de nuestra identidad desde siempre. Pero en los pueblos costeros, dicen quienes han vivido los viejos tiempos, la forma de vida que se generaba en torno a los puertos pesqueros antes era muy distinta.

Hoy en día, a pesar de que todavía existen pequeños pesqueros que zarpan a diario y se dedican a embarcar peces de forma artesanal, el desarrollo de la tecnología y el modelo de la industria piscícola hacen que la imagen de nuestros puertos sea muy diferente. Pero, al igual que los recursos con los que cuenta el mar son los de la ciudadanía, la Pesca Diurna es también la forma de vida de una parte de nuestra sociedad. Parte de la historia y la cultura de nuestro país. Patrimonio.

¿Cómo sería el País Vasco, sin pesca? ¿Cómo serían nuestras pescaderías, sin sus peces? Está en manos de todos qué pescado compramos, qué pescado consumimos, qué patrimonio queremos proteger. No podremos parar la globalización, pero, a nuestro alrededor, lanzando una serie de prácticas a nuestro alcance, con pequeños gestos podemos conseguir grandes cosas.

En este sentido, la soberanía alimentaria, además de mostrar una actitud favorable a nuestro país, garantiza la apuesta por la identidad, el ámbito laboral, el entorno y las actividades sostenibles. ¿Qué tipo de compra haremos la próxima vez en la pescadería?